viernes, 26 de abril de 2013

Hoy tocaba castigo y así fue.

¡Hola a todo el mundo!

Hoy por la tarde tocaba entreno. Pero no uno cualquiera. Hoy quería castigarme. No sabía muy bien qué ruta hacer, cosa muy habitual en mí, pero una cosa clara tenía. Había que subir.

Para ello no quedaba otra que tirar para el norte. El final, por unas cosas y otras, todos los caminos van a La Robla, no a Roma. Pero me apetecía variar algo. En lugar de ir por la carretera de Lorenzana, fui por la carretera de Asturias. Para los que no sean de la zona, vendría a ser la que conduce a Pajares.

Los primeros pensamientos que me surgieron iban dirigidos a todas aquellas personas que opinan que la subida de Pajares por León es poco menos que un paseo por el parque. Pues veréis. Efectivamente no es la vertiente asturiana, mucho más dura. Pero de León a La Robla por esta zona, y eso que luego quedarían unos 30 Km hasta el puerto, no paras de subir desde que sales de León ciudad. 

Es una carretera perfecta para entrenar fuerza porque en plato pequeño, que en realidad es lo que te pide el cuerpo, vas parado. Pero en plato grande, que es lo que al final llevas por puro orgullo, vas más rápido, sí, pero a costa de ir a 150 pulsaciones durante 25 kilómetros. Tiras y tiras del 52-25 como si no hubiese día de mañana. Pero como era lo previsto, pues sólo puedo decir que misión cumplida.

De segundo plato en el menú del entreno de castigo, decidí comerme la subidita de Olleros por el pueblo. Me gusta mucho, la verdad. Es de las que tienen varios kilómetros sin rampas salvajes, que es lo que a mí me abrasa. Lo mejor de todo fue disfrutar de esta zona con una temperatura muy agradable y solecito por doquier. Problema. Para el domingo dan nieve a 500 metros. Bienvenidos a León.

Tocaba refrigerar un poco en una fuente que hay casi al final de la subida. Ya tenía ganas de llegar a este punto porque me había quedado seco. Hacía tiempo que no me castigaba con la bici y se notaba. Lástima que mi nuevo amigo Gustavo no pudiese darme un poco de conversación...


Tras dejar atrás el territorio de mi nuevo amigo anfibio, ahora me dirigía al Cillerón. En alguna otra ocasión he comentado que es mi subida favorita de las cercanas a la ciudad. Paisaje precioso, subida más o menos larga sin ser puerto, buena carretera. 

Al fondo divisé un cicloturista y, como yo estaba encendido, decidí ir a su caza y captura. Cuando llegué a su altura me percaté de que el compañero quería compañía, así que bajé el pistón y terminé la subida con al a ritmo lento. No pasaba nada. Como, además, el nuevo compañero me iba a dejar las riendas de la ruta a mí al terminar de subir esto, pues apretaría algo más, que ya es llano.

Total. Me puse a tirar. Y os recuerdo que seguía encendido. Que cuando me enciendo me enciendo, ojo. Y efectivamente, cuando miré para atrás a comprobar si iba bien el compañero, me di cuenta de que estaba ya a 300 metros. Vamos, que le abrasé. Pero seguía encendido, no sé qué me pasaba, así que continué apretando.

Había que bajar la Hoja. Asco de sitio para bajar y para subir. Bajando es un peligro y subiendo con la grupeta o con los grupos así potentes yo me suelo descolgar, así que es un sitio que tengo cruzado de verdad.

Para finalizar el día, de camino a casa empecé a sentir unas sensaciones extrañas y conocidas. Menos mal que las percibí al llegar a casa. Sí. Como algunos de vosotros habréis adivinado, porque sois muy perspicaces, empecé a notar el sobrevolar de la pájara cerca de mí. Eso era síntoma de que me había castigado duramente...¡con lo que buen trabajo!

Al final, la ruta fue esta, pinchad aquí, a ver qué os parece. Os la recomiendo para cascaros un buen entreno y también disfrutar del panorama.

A ver si estos días puedo continuar haciendo kilómetros de éstos, encontrarme con ranas y asuntos de estos, pero me parece que nos vamos a encontrar con el invierno otra vez. Hasta el 40 de mayo....aguas mil.

2 comentarios:

  1. Corre Forrest, corre!. La vida es como una caja de bombones, nunca sabes lo que te vas a encontrar. Bonita ruta!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. jejejeje...Sí!!! Me encanta esa ruta!!

      A ver si coincidimos este domingo en el club!!

      Eliminar