Ya he comentado en anteriores entradas y, por evidente no hace casi falta que lo diga, pero la bicicleta y, en general, cualquier actividad deportiva es buenísima para el cuerpo. Cardiovascularmente hablando eres una persona distinta, músculos a tono, control de peso, ...en fin, como ya he comentado otros días, es todo positivo.
Pero hoy me gustaría comentaros un poco por encima lo que supone el deporte para la mente. Es evidente que voy a hacer hincapié en el ciclismo (qué sentido tendría el blog por tanto, jejejejeje)
A veces os he comentado que el ciclismo engancha. Hace unos años estuve entrenando fuertemente a atletismo. Más que nada era velocista (200m sobre todo) pero como a mi me gusta probar un poco de todo, pues también corría fondo. Recuerdo que durante varios años tenía los domingos marcados como el día que hacía fondo y, 15 km todos los domingos os aseguro que es fondo. Pero, sin embargo, me sentía enganchado a este deporte también, de una u otra manera. Me encantaba el atletismo (ojo, a día de hoy también) Las rodillas me dijeron que mejor me buscase otra cosa de menos impacto y ahora pedaleo, pero a lo que os voy es que también estaba muy enganchado. ¿Por qué?
Pues bien, ahora os voy a dar un dato que puede que os resulte sorprendente. ¿Sabeis qué tienen en común hacer ejercicio, comer chocolate, el sexo o el consumo de opiáceos? LAS ENDORFINAS. Tienen un efecto analgésico y de bienestar al que el cerebro no se puede resistir y se engancha el pobre. Son producidas por la glándula pituitaria y el hipotálamo (no soy un experto pero creo estar en lo cierto)
Por eso el ejercicio es tan saludable. Te genera, a parte de todas las consecuencias positivas en el sistema oseo o muscular, también muchos beneficios al sistema nervioso central.
También se produce algo, cuanto menos curioso. Hoy día, con todos los aparatos que nos hacen compañía (televisión, radio, móvil, internet, mp3, etc) no es fácil estar sólo contigo mismo. No es fácil pero, creo que es muy necesario. En atletismo se produce lo que se denomina, LA SOLEDAD DEL CORREDOR DE FONDO. Es el largo tiempo, durante los entreno y/o competiciones, en el que la concentración es tan máxima, que estás tú solo y nadie más.
Al cicloturista también le pasa lo mismo. Os comentaba el otro día, al ver la rivera de uno de mis ríos favoritos, la cantidad de cosas que se me pasaban por la cabeza. Pues es que no sólo es cuando te encuentras con algo en concreto. Estás pensando todo el rato. Para mi es un momento muy especial. De hecho, a día de hoy tengo infinidad de cosas en la cabeza y el único momento de verdadera paz y calma es cuando monto en bicicleta. Hay días que lo necesito de verdad. Necesito ese rato, podríamos decir que incluso íntimo en el que sólo estás tu y tus pensamientos. Os lo recomiendo.
Así que ya sabeis. A parte de bueno para el cuerpo, el cicloturismo es bueno para la mente y te enganchas!!!! Además haces amigos. Esto es mucho mejor que el botellón. DÓNDE VA A PARAR!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario