¡Hola a todo el mundo!
No sé por el resto de mundo mundial, pero lo que es por León, no para de llover. Los últimos tres días en los que realmente he tenido bastante tiempo para salir a entrenar con la bici, no lo he podido hacer por la lluvia.
Y lo más gracioso de las largas temporadas de lluvia, como la que está azotando León esta semana, es que desarrollas tus capacidades como jugador. Sí, sí. Como lo estáis oyendo. Todos los días te despiertas, miras el cielo y tienes que hacer tu apuesta. Salir o no salir.
Este sábado pasado, yo aposté por no salir. Y me fastidió un montón porque hacía tiempo que no quedaba con la Grupeta Cicloturista León. Según pasó la mañana descubrí que mi apuesta fue errónea ya que no llovió nada de nada. Conclusión. tocaba salir a correr. No es que sea algo que me desagrade hacer, es más, me gusta mucho, pero hace como una semana que no saco "la Americana" a pasear.
Y con las ganas que os podéis imaginar que tengo de rodar de nuevo por las carreteras, se presentó el domingo encapotado. Y de nuevo debía de hacer una apuesta. Salir o no salir. Volví a optar por no salir, aunque hoy la cosa fue mucho más fácil ya que estaba jarreando desde primera hora. Total, que a trotar de nuevo.
En los últimos 15 días me parece que he hecho más kilómetros corriendo que rodando con la bici, pero bueno, al menos no estoy parado.
Resumiendo. La semana que entra, nos va a tocar seguir haciendo apuestas según todas las previsiones. Esperemos que amaine el temporal, porque tengo unas ganas terribles de rodar seriamente de una vez. Pero eso sí. Siempre hay que hacer algo.
¡Que nadie te pare!
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